Vistas de página en total

domingo, 29 de abril de 2018

MANDILAR : 2.220 MTRS.

INICIO : Párquing de la estación de esquí de Panticosa …………………… 1.146 msnm. MANDILAR …………………..2.220 MSNM. DESNIVEL Y HORARIOS : 2h y 45 mins ascenso. 15 mins para almorzar y 2 h. de descenso. Pues seguimos con la temporada en la que parece que cada fin de semana se monta una buena y llueve, nieva y la nieve está de poco fiar, con lo que nosotros también seguimos con la retahíla de montañitas, que a la postre nos satisfacen tanto como otras mucho más altas. Así que esta vez, que anuncian mucha lluvia e incluso nieve, y que además no hay una visibilidad a mayores altitudes como para meterse en empresas más osadas, elegimos el Mandilar como objetivo para este 28 de Abril. Montaña fácil de ascender, sin peligros de ningún tipo, pero con un desnivel cercano a los 1.100 metros, que ya la hacen exigente y nos decidimos por ella la víspera. Salimos como otras veces del aparcamiento de la estación de esquí de Panticosa. Son las 8,10 h. de la mañana. Cruzamos el puente, y esta vez decidimos que para empezar no nos apetece mucho remontar la pista de esquí que nace a los pies del río. Tomamos por ello la pista que sale a la derecha y asciende a través del bosque de manera más cómoda. Más adelante iremos combinando pistas de esquí con tramos de camino por decirlo de alguna manera. La mañana no promete mucho en cuanto a meteorología se refiere. La cuestión está en esperar que no nos llueva hasta que estemos de vuelta y cuanto más abajo mejor. Por el contrario no hace nada de frío y no corre ni gota de viento, con lo que se está a gusto. Poco después comienza el terreno nevado con una nieve dura, hielo que hace que nos calcemos los crampones. Pasamos junto a las instalaciones de Petrosos y un poco más arriba enterramos nuestras preciadas bebidas isotónicas en la nieve para beber después cuando regresemos a este punto, y nos comamos la empanada de rigor. Sin perder mucho más tiempo y arreando a buen ritmo como toda la mañana por el tema de la lluvia, seguimos para arriba. Entramos por la pista de esquí que llaman El Tubo, con la Montaña del Verde a la izquierda y Mandilar enfrente. En el centro de nuestra vista tenemos Sabocos, que se ve a ratos y desaparece otros, tapado por la niebla. El camino es claro, y la visibilidad más que suficiente. Además sigue sin llover, ni soplar viento. Es como si la meteo sólo respetase al Mandilar, al Verde y poco más. A estas alturas el esfuerzo empieza a pesar, son bastantes metros como para acusarlo, y más al ritmo que hemos subido. Pero la cima está tan cercana que con un último tirón la alcanzamos en 2h y 45 minutos. Encontramos unas vistas que no tienen nada que envidiar a las de un día soleado, siendo diametralmente opuestas. La visión del embalse de Búbal abajo y de Sabocos seccionado en su último tercio por la niebla es espectacular. Montaña del Verde; sobre Búbal la Sierra de la Partacua también censurada por las nubes… un auténtico regalo para la vista. Hacemos unas fotos y como seguimos un poco con las prisas por si llueve, nos vamos para abajo. No sabemos si almorzar en el punto donde enterramos las bebidas o si quizá tengamos que cogerlas y dar cuenta de la vitualla ya en el aparcamiento y a cubierto. El caso es que llegamos al lugar donde nos esperan las latas, sigue sin llover y se está muy bien. Arriba hacía ya más frío y hemos tenido que abrigarnos. Paramos a almorzar. Lo hacemos con calma y nada más terminar salimos para abajo. Ahora lo que tenemos es calor. Vamos tan contentos con la mañana tan buena que hemos tenido, secos, sin frío, que aún se podía tener un poco más de suerte. Pol detecta un euro entre la nieve. Lo recoge. Damos tres pasos y veo otro. Risas. Bajamos unos pasos y de repente otro. Qué generosidad la de esta montaña que nos paga las cañas que nos vamos a beber en cuanto lleguemos al parquin. Una hora después y ya siempre por las empinadas pistas de esquí llegamos al coche. No nos ha llovido ni una gota, pero es que además para cumplir con la invitación del Mandilar, nos bebemos un par de jarritas al sol. Porque el astro decide salir tímidamente durante media horita. No se puede pedir más. Así que otra jornada de montaña más que satisfactoria. Esperamos que en Mayo podamos tener otra con igual resultado en Sabocos. Y esto es todo. Gracias por leerme y hasta pronto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario