PICO TABLATO/SARRATO : 2.700 MTRS.

SALIDA : Balneario de Panticosa……1.636 msnm. PICO SARRATO/TABLATO……………..2.700 msnm. DESNIVEL : 1.064 metros aproximadamente. TIEMPO : 5 horas y 35 minutos. Salida a las 8,40 h y cima a las 12 h. Balneario a las 14,15 h. Son las 8,40 h de la mañana cuando echamos a andar en el Balneario de Panticosa, ya con los crampones puestos. Donde tendría que haber escaleras para tomar el camino hacia los ibones de Brazato, hay una ladera de nieve helada y el camino habitual está bajo esos dos metros de nieve. Por tanto, en el laberinto de huellas duras que se abre ante nosotros, tiramos para arriba con decisión. Sabemos que ese camino habitual es avalanchoso, que por eso hay un muro antialudes un poco más arriba, y por ello tomamos dirección hacia el ibón bajo de Brazato, yéndonos más a la derecha en el sentido del ascenso. La mañana es sensacional, nada fría y el cielo limpio nos permitirá gozar de unas vistas increíbles durante toda la jornada, especialmente desde la cima. Salvo una breve parada para quitarnos ropa y compartir un plátano y agua, no paramos para nada. A la hora de ascenso más o menos, ya vemos aparacer en el horizonte el Pico Sarrato/Tablato. Seguimos subiendo con nieve muy dura a estas horas. Ante nosotros una pala larga nos depositará en las inmediaciones del ibón bajo de Brazato, y a los pies del Pico Tablato. Vemos asomar el Baciás y La Punta del Puerto. Una vez en este punto, tenemos tres posibilidades. Coger un largo tubo, muy largo, que nos depositaría en las inmediaciones de la cima. Ganar el arranque de la cresta a cima por un colladito a la izquierda en el sentido de la marcha y que nos depositará ante los Picos de Brazato y con el Ibón alto homónimo a la vista o coger el collado de la derecha, más tieso. Este último será el camino de descenso y el collado de la izquierda el elegido para subir. El tubo lo desechamos porque es muy largo, debe ser agotador. Un grupo de 4 lo toman y llegarán arriba algo más tarde que nosotros. Una vez ganado el collado elegido, aparecen ante nosotros los Picos de Brazato, el Vignemale y otros muchos picos de la zona. Aquí arranca la cresta que conduce a la cima. Al principio muy sencilla y aunque no llega a ponerse difícil o peligrosa, sí que va ganando en ambiente y en algo de exposición. A estas alturas y ante este esfuerzo, las piernas se van quejando. Vemos ya no lejos de la cima que esta está ocupada por una pareja con la que estuvimos cambiando impresiones al poco de salir del Balneario. Pol no tarda en llegar y yo lo hago un poquito después. Son las 12 del mediodía. Las vistas son espectaculares mires hacia donde mires. Vemos hasta el macizo del Perdido. Sierra de Tendeñera, Partacua, macizo de Collarada y toda la zona de Infiernos Argualas. Más cerca tenemos los Picos de Brazato y un poco más al fondo el Vignemale. La vista sobre el ibón alto de Brazato, helado, espectacular. Sobre este, el Baciás, La Punta del Puerto. Vemos una panorámica difícil de olvidar. Nos sentamos un rato al sol y nos disponemos a dar cuenta de una empanada de atún que se nos antoja un manjar. Aquí viene lo único decepcionante del día : Lo que he metido en la mochila, resulta ser cuando la desenvolvemos, una porción de tarta de queso. De la misma que hemos desayunado hace 4 horas ¡!!!!! En fin, mi cara, según Pol cuando vi la tarta en vez de la empanada, era de dar miedo casi. Comemos un trozo cada uno, bebemos abundantemente y decidimos la bajada. No vamos a bajar deshaciendo toda la cresta. Vamos a hacerlo por la otra vía que desde abajo veíamos y que para descender se antoja mucho más amable. Comenzamos el descenso, hasta el collado inferior. Lo traspasamos y seguimos bajando. La nieve va estando cada vez más blanda, por lo que en cuanto lleguemos al rellano inferior, quitaremos los crampones y nos calzaremos las raquetas. Así lo hacemos. Una esquiadora aparece con los bastones de Pol que los había perdido por el camino. Ha habido suerte. Tras ponernos raquetas continuamos con el descenso. Este se va haciendo pesado. O coges nieve helada y pendientes pronunciadas, con lo que iríamos mejor con crampones, como que atravesamos una zona soleada y con la nieve ya muy blanda con lo que las raquetas se hacen necesarias. Yo ya no me quitaré las raquetas hasta casi el Balneario, y Pol por el contrarios, lo hará con los crampones, principalmente porque las raquetas no le van bien y se le salen, se le desmontan… un desastre. Sin ningún hecho reseñable salvo una culada que me pego y la raja en la culera del pantalón, vamos bajando disfrutando del magnífico día de montaña que hemos tenido. Por fin llegamos de nuevo al Balneario. Son las 14,15 h, con lo que la cuenta es de 5h y 35 min de actividad. No es una barbaridad de tiempo, pero ya sabemos el desgaste que suponen estas ascensiones invernales. Cansados, hambrientos y sedientos nos vamos a Sallent a comer. Una jornada inolvidable de montaña. Gracias por leerme y hasta la próxima.